En su parte o perspectiva de verdad, en cierto modo, el racionalismo nos lleva a concluir que la ley suprema sería aquella que supedita lo legal a lo moral, asentándose lo moral en lo racional. Dicho de otro modo, aquella en la que la ley moral es ley. Aquella que Spinoza probablemente podría llamar ley intelectual; basada en el amor al prójimo, emanación del amor a Dios, en armonía con la razón pura y, por ende, con la auténtica autonomía y libertad. Imperativo categórico motu propio.
La ley divina sería, por tanto, ley suprema y natural (sellada en el alma).
Cualquier ley será, lógica y necesariamente, más justa cuanto más se aproxime a esa ley perfecta; a esa idea arquetípica —modelo ideal— de genuina y límpida libertad.
Retratos es un libro de poemas que, a modo de pictóricos lienzos, eternizan el momento pasajero. En él se disecciona, metafóricamente, una sucesión de instantes congelados por siempre sobre el tiempo. Pequeños retazos en remembranza de fugaces sombras preteridas
Un gran despliegue de relatos poliédricos que sorprenderá gratamente
a los lectores. Un ejercicio de talento literario e imaginación sin límite
alguno. Una vez que comience por el primero no podrá parar.
Aire Nuestro 