Muy abundantes son las referencias al Antiguo y Nuevo Testamento en el Quijote. Se estiman en cerca de quinientas, si no más. Al margen de las citas textuales, procedentes en su mayoría de la Vulgata —que el concilio de Trento había ratificado— (citas en castellano fundamentalmente, pero también en latín), encontramos alusiones a conocidos sucesos bíblicos (el episodio de la estrella en el nacimiento del Señor, por ejemplo), perífrasis de diferentes pasajes, y menciones a famosos personajes de la Biblia.
En definitiva, Cervantes era un gran conocedor del texto sagrado, por el que, además, mostraba, sin duda alguna, gran respeto y querencia. Buena prueba de ello dejó para la posteridad en su genial novela.
Retratos es un libro de poemas que, a modo de pictóricos lienzos, eternizan el momento pasajero. En él se disecciona, metafóricamente, una sucesión de instantes congelados por siempre sobre el tiempo. Pequeños retazos en remembranza de fugaces sombras preteridas
Un gran despliegue de relatos poliédricos que sorprenderá gratamente
a los lectores. Un ejercicio de talento literario e imaginación sin límite
alguno. Una vez que comience por el primero no podrá parar.
Aire Nuestro 