
EL REGRESO de José Luis Lejárraga
ENTRA SIGILOSO EN LA HABITACIÓN, luz de luna tami-
zada por visillos, y vislumbra el cuerpo de su mujer
sobre la cama.
POSESIÓN de Iván Sevillano Bueno
APENAS VIENE A VISITARME, y ni siquiera me entrega
ya el consuelo de su llanto. No retengo su perfume
de siempre, pues apenas se detiene, y se ha cortado
el pelo aun sabiendo mi desagrado.