El dinosaurio
Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí.
AUGUSTO MONTERROSO (Tegucigalpa, 21.12.1921 – Ciudad de México, 7.02.2003)
La culta dama
Le pregunté a la culta dama si conocía el cuento de Augusto Monterroso titulado “El dinosaurio”.
—Ah, es una delicia —me respondió—, ya estoy leyéndolo.
JOSÉ DE LA COLINA (Santander, España 29.03.1934)
Otro dinosaurio
Cuando despertó, los dioses todavía estaban allí, inventando a la carrera el resto del mundo.
EDUARDO BERTI (Buenos Aires, Argentina, 1964)
Los dinosaurios, el dinosaurio
Cada soñador (¿o habría que decir durmiente?) tiene su dinosaurio, aunque lo común es que no lo encuentre al despertar. Soñadores impacientes despiertan siempre antes de que sus dinosaurios lleguen, y dinosaurios impacientes siempre se van antes de que sus soñadores despierten. Lo admirable del cuento de Monterroso consiste en presentar el único caso en que el tiempo del soñador coincidió con la paciencia de su dinosaurio y la impaciencia de un considerable número de lectores.
RAÚL BRASCA (Marcos Paz, Buenos Aires, 1948)
Mascota
Tras la muerte de mi viejo perro me dio por ir a la pajarería y comprar un dinosaurio. Verde. Horroroso. Enorme. Cuando la chica de la tienda lo sacó de la jaula ya le tenía un poco de miedo, pero aun así pagué por ser su esclavo. Todavía crecerá bastante, me dijo la dependienta, mirándome con algo de lástima al devolverme el cambio. Pensé que con el tiempo me acostumbraría a su cara de ginecóloga sádica y al cráter de escamas y excrementos que sembraba entre mis sábanas cada noche. Pero con todo, lo peor de nuestra convivencia no era tener que dormir en el sofá o salir a la calle en busca de animales perdidos que calmaran su milenaria falta de escrúpulos. Lo peor era levantarse por la mañana, asomarse de puntillas al dormitorio y comprobar que, por desgracia, él seguía estando allí.
PATRICIA ESTEBAN ERLÉS (Zaragoza, España, 1972)
bellísma serie! gracias
Me gustaMe gusta
……..y cuando el Paleontologo despertó,el fosil se habia ido.
Me gustaMe gusta
Era una noche fría de 2017. Al cabecear ya a punto de hundirme en el sueño, pensé en el dinosaurio de Monterroso. A la mañana, él ya no estaba ahí.
Me gustaMe gusta