Dos películas señeras de la filmografía española y, en verdad, particularmente brillantes son obra de Víctor Erice: El espíritu de la colmena y El sur. Estrenadas en 1973 y 1983 respectivamente.
La primera de ellas (título tomado de un libro de Maeterlinck), alegoría de la vida española inmediatamente después de la Guerra Civil, cuento simbólico metacinematográfico, está producida por Elías Querejeta y protagonizada por Fernando Fernán Gómez y una muy joven Ana Torrent junto a Isabel Tellería y Teresa Gimpera. El guión lo escribió el propio Erice en colaboración con Ángel Fernández-Santos. La dirección artística corrió a cargo de Jaime Chávarri. El mítico cartel es obra del gran Cruz Novillo.
En El sur, producida también por Querejeta, los efectos de la Guerra Civil también están muy presentes en la historia, que además deviene en crisis de pareja. Un retrato muy logrado de la sociedad del momento que describe. Entre otros actores interviene Icíar Bollaín.
La película iba a tener una segunda parte que no llegó a rodarse. Fue seleccionada para el Festival de Cannes, cosechando muy buenas críticas.
Entre otros lugares icónicos, hay escenas grabadas en el famoso Café Barbieri de Lavapiés.
Dos grandes películas. Dos joyas del cine español.

Retratos, el nuevo libro de David Baró, lo conforman poemas que, al modo de pictóricos lienzos, eternizan el momento pasajero. En él se disecciona, metafóricamente, una sucesión de instantes congelados por siempre sobre el tiempo. Pequeños retazos en remembranza de fugaces sombras preteridas.